La compra y venta de automóviles entre particulares en Chile está regulada por la Ley del Consumidor y el Código Civil, y es importante hacer una compra informada y tomar las precauciones necesarias para evitar problemas y reclamos posteriores.
El crédito automotriz en compra venta entre particulares funciona de manera similar al crédito que se obtiene a través de una institución financiera tradicional, con la diferencia de que no existe un intermediario, como una agencia o un concesionario (automotora).
En términos generales, el proceso suele seguir los siguientes pasos:
El comprador y el vendedor deben acordar el precio del vehículo. Luego entra en juego el Ejecutivo Financiero quien es el encargado de entregar las condiciones de pago, tasa de interés, el plazo del crédito, el monto de la cuota y la fecha de pago.
El comprador debe solicitar un crédito automotriz a través de una institución financiera. Para ello, se requiere presentar cierta documentación como comprobante de ingresos, identificación oficial, comprobante de domicilio, entre otros. La institución financiera evalúa la solvencia del comprador y aprueba o rechaza la solicitud.
Si la solicitud es aprobada, se firma el contrato de crédito, que establece las condiciones y obligaciones de ambas partes.
El vendedor inicialmente recibe lo que es el Pie del crédito (puede ser en efectivo, transferencia, vale vista, entre otros), dependiendo de lo que sea lo más cómodo, tanto para comprador como vendedor. El pago del Saldo del crédito, se realiza una vez transferido el vehículo, este puede ser mediante vale vista o transferencia electrónica (también depende de lo más cómodo para el vendedor, en este caso).
Es importante destacar que, en este tipo de transacciones, es recomendable tomar ciertas precauciones para evitar fraudes o estafas.
Por ejemplo, se recomienda realizar una verificación exhaustiva del vehículo antes de la compra, verificar que la documentación esté en orden y no transferir el dinero hasta que se tenga la certeza de que el vendedor es el propietario legítimo del vehículo.